Ubicado en el corazón de Medellín, el barrio El Perpetuo Socorro nació como una zona industrial llena de talleres, bodegas y fábricas que abastecían a gran parte de la ciudad. Durante décadas, fue un punto clave para el desarrollo económico, aunque poco frecuentado por residentes y visitantes. Su nombre proviene de la Iglesia de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, un templo neogótico construido entre 1944 y 1952 que aún se mantiene como uno de los íconos arquitectónicos del sector.

Con el paso del tiempo, y gracias a la transformación urbana y cultural de Medellín, el Perpetuo Socorro comenzó a reinventarse. En 2018 se conformó la Corporación Perpetuo Socorro, una alianza entre instituciones públicas, privadas y académicas que impulsó la renovación del barrio con un enfoque en la economía creativa. Un año después, fue reconocido oficialmente como el primer Distrito Creativo y Área de Desarrollo Naranja (ADN) de la ciudad, abriendo sus puertas a emprendedores, artistas, diseñadores y proyectos culturales.

Hoy, el Perpetuo Socorro combina su esencia industrial con una nueva identidad llena de arte, gastronomía, innovación y cultura. Sus calles albergan restaurantes, cafés, galerías, estudios de diseño y espacios colaborativos que le han dado vida a uno de los sectores más inspiradores de Medellín. Este cambio ha sido tan notable que en 2025 la revista Time Out lo incluyó entre los barrios más “cool” del mundo, destacando su energía creativa, su arquitectura renovada y su ambiente comunitario.

El Perpetuo Socorro es, sin duda, un símbolo de transformación: un lugar donde el pasado industrial se mezcla con el presente creativo para ofrecer una experiencia única a quienes lo visitan.